Báilame como quieras, báilame,
que tu ritmo me vuelve loca, Salomé.
Tanta adrenalina sube a mi cabeza,
miro como bailas y sale el fuego de tus caderas.
Y con mi tambor, tú y yo vamos acercándonos,
es la tentación que me vuelve loca y me desespera.
Y es que tu cintura, mi sutil locura,
me vas atrapando, me vas elevando.
Y es que está en tu cuerpo, nene,
que respira vida, nene,
y es que tienes todo en esta vida 'pa' gozar.
Baila, que ritmo te sobra,
baila que báilame,
acércate un poquito, Salomé.
Baila, que ritmo te sobra,
baila que báilame,
acércate un poquito, Salomé.
¡ Ay, ay, ay !, tú bajaste desde el cielo,
¡ Ay, ay, ay !, y me echaste al candelero.
¡ Ay, ay, ay !, tú bajaste desde el cielo.
¡ Ay, ay, ay !, mira, niño, si te quiero.
Eso ...
Pero, ven y baila, síguete acercando,
que con tu sabor, que es Caribe y sol, seguimos
gozando.
Tu ritmo se ve, mi amor, cuando cae tu sudor,
y tus movimientos parecen más que un campo sagrado.
Y es que tu cintura de silueta y luna
que me va atrapando, me va alucinando.
Y es que está en tu cuerpo, nene,
que respira vida, nene,
y es que tienes todo en esta vida 'pa' gozar.
Baila, que ritmo te sobra,
baila que báilame,
acércate un poquito, Salomé.
Baila, que ritmo te sobra,
baila que báilame,
acércate un poquito, Salomé.
¡ Ay, ay, ay !, tú bajaste desde el cielo,
¡ Ay, ay, ay !, y me echaste al candelero.
¡ Ay, ay, ay !, tú bajaste desde el cielo.
¡ Ay, ay, ay !, mira, niño, si te quiero.
¡ Ay, ay, ay, ay !, Salomé.
¡ Ay, ay, ay, ay !, Salomé.
Báilame como quieras, báilame,
que tu ritmo me vuelve loca, Salomé.
Báilame como quieras, báilame,
que tu ritmo me vuelve loca, Salomé.
Baila, que ritmo te sobra,
baila que báilame,
acércate un poquito, Salomé.
Baila, que ritmo te sobra,
baila que báilame,
acércate un poquito, Salomé.
Baila, que ritmo te sobra,
baila que báilame,
acércate un poquito, Salomé.
Baila, que ritmo te sobra,
baila que báilame,
acércate un poquito, Salomé.