Cuando rodó cual gota cristalina Sobre su faz la lágrima de amor Me pareció su cara tan divina Un lirio azul besado por el Sol Y recordé que aquella muchachita Guardaba en su alma, ya muerta la ilusión Porque el galán después de tantas citas Le hizo morir de angustia el corazón Cuando ve la carta amarillenta Llena de pasajes de su vida Siente que la pena se le aumenta Al ver tan destruida La esperanza que abrigo El hombre aquel a quien adoro tanto Y le entrego su vida virginal La hizo empapar su juventud de llanto La hizo vivir cien noches de ansiedad Y al recordar la dicha que soñara Mira esa carta que un día el le mando Pidiéndole que ella lo perdonara Si nunca más volvía... Y no volvió Esta triste historia de su vida Que ella, cabizbaja, me contaba Mientras que una lágrima rodaba Por su hermosa cara Llena de amargo dolor