Sentada en una silla Sola frente al champán Hay una milonguita De muy tierno mirar Una perla en su cara Se ve lento rodar Es la pobre mamita que llora A su nena que enfermita está La tierna madrecita Desconsolada, llorando está Porque recuerda Que allá en su casita La pobre nena la llamará Y en el derroche de alegría Siente, como un reproche Mamá, mamá Pobre la madrecita Donde palpita tanto dolor Tuvo que dejar sola A ese pedazo del corazón Debe bailar el tango Brindar caricias, fingir amor Nadie tiene por ella Ni una palabra de compasión Su linda nena rubia De ojos azules de querubín Está muy enfermita Da mucha pena verla sufrir La tierna milonguita Que es madrecita debe sentir Y en silencio ruega Oh, Virgen mía, se va a morir Madrecita del alma Que así llorando estás Tan silenciosamente Mientras bebes champán No hay uno que comprenda Tu íntimo dolor Lo que pasa en tu alma, madrecita Solo lo saben tú y Dios